A continuación te explicaremos cuáles son las principales diferencias entre el aborto espontáneo, inducido y terapéutico:
El aborto espontáneo es aquél que se presenta involuntariamente debido a alguna anomalía y ocurre antes de la semana 20 de embarazo. Este tipo de abortos es más común de lo que se cree, se estima que entre el 10% y el 20% de los embarazos terminan por un aborto de este tipo.
En la mayoría de los casos es muy difícil predecir que se presentará, pero también en la mayoría no tiene repercusiones mayores ya que las mujeres pueden volver a embarazarse y culminar bien sus embarazos. En caso de que se presente un aborto de este tipo se debe acudir al médico para que se asegure que todo el producto fue expulsado, de no ser así practicar alguna táctica que permita la expulsión total.
Por su parte el aborto provocado es aquél que se realiza por decisión de la mujer, también es conocido como Interrupción Legal del Embarazo. El ILE en México puede practicarse hasta la semana 12 de gestación, en la Ciudad de México puede hacerse si la mujer así lo solicita, en otras entidades federativas sólo se practica bajo ciertas circunstancias.
El aborto puede practicarse a través de diferentes medios como pueden ser con el uso de píldoras abortivas, aspiración manual endouterina o legrado uterino. Estas técnicas se realizan previa revisión del médico especialista quien es el que puede definir qué tipo de aborto se puede realizar con base en las condiciones de salud de la mujer, qué tan avanzado está su embarazo y otras indicaciones que él defina.
En cuanto al aborto terapéutico es aquel que se realiza justificado por razones médicas, ya sea porque está en riesgo la vida de la madre, para evitar el nacimiento de un niño con una enfermedad congénita o genética grave que es fatal o que le condena a padecimientos o discapacidades muy graves, que ponen en peligro mortal su vida.